Si cuentas con una empresa que se presta servicios de limpieza e inspección de tuberías o sifones, localización de arquetas, reparación de tuberías, desagües o desatascos entre otros muchos servicios de fontanería, te convendrá saber cómo desgravar al máximo en tu empresa de fontanería, ya que de ello dependerá lo que vas a tener que abonar a Hacienda en concepto de IRPF.
Como primera consideración general, debes tener en cuenta que la deducción del IVA tendrás que hacerla antes de que pasen cuatro años de la emisión de la factura, la cual deberá estar debidamente justificada y reflejada en los libros de contabilidad de tu empresa. Te presentamos algunos puntos que pueden resultarte interesantes si quieres desgravar al máximo en tu empresa de fontanería:
- Consumo de explotación. Es decir, las adquisiciones de bienes corrientes que utilizas como fontanero, y donde se incluyen las compras de mercaderías como tuberías o codos, envases, materias primas o embalajes.
- Seguridad social a cargo de la empresa, donde se incluyen las cotizaciones del titular de la empresa, además de las cotizaciones derivadas de la contratación de trabajadores. En otros gastos de personal es desgravable el pago a las Mutualidades de Previsión Social de profesionales no integrados en el régimen de Seguridad Social y cualquier otro pago relacionado con el personal al servicio de la actividad.
- El IVA soportado: se refiere a las compras de bienes o servicios que realiza el autónomo. Además, el IVA es deducible en la proporción que el gasto esté relacionado con la actividad.
- Entre otras provisiones deducibles, quizá te interese saber que las provisiones para riesgos y gastos acaecidos fuera de las actividades ordinarias y que no se espera que vuelva a producirse de forma habitual, podría tratarse del caso de una emergencia en fontanería, también son deducibles.
- Como gastos especiales también te puedes deducir el vestuario. Ten en cuenta que sólo se admite el gasto en vestuario profesional, como uniformes u otras prendas con el anagrama del negocio.
- Suscripciones a libros y revistas provisionales que sean de interés para el desempeño de tu actividad profesional. Así como materiales de imprenta para dar a conocer tu negocio. Por ejemplo, podrás deducirte en la elaboración de tus tarjetas de visita.
Además, en la partida de gastos derivados podrás desgravarte por la formación de personal así como por los seguros de accidentes y las contribuciones a planes de pensiones del personal.
Y es que tan importante como desgravar al máximo en tu empresa de fontanería es cuidar y proteger todo tu patrimonio con un seguro para Autónomos y Emprendedores que te cubra de todos los riesgos a los que puedes estar expuesto durante el desempeño de los servicios de fontanería.