Analizando los distintos incidentes que tienen lugar en los bloques de viviendas, los daños por agua encabezan el ranking con notable diferencia. De forma anual se producen 700.000 percances de este tipo aproximadamente, seguidos de los fenómenos atmosféricos cuya cifra desciende hasta los 120.000 casos según cifras estimadas.
Según datos de Unespa, el conjunto de los seguros multirriesgo del hogar, comunidades de propietarios, comercio e industrias atienden en torno a 9 millones de percances al año. Teniendo en cuenta que los daños por agua es uno de los siniestros más frecuentes en los edificios residenciales, es fundamental suscribir un seguro de comunidades de propietarios que contemple esta cobertura.
Asimismo, es importante que la póliza también responda frente a la responsabilidad civil que se pueda originar por el percance. En caso contrario, la propia comunidad debe asumir los gastos de la reparación y las posibles indemnizaciones a terceros.
Tipos de daños por agua en las comunidades
Los daños por agua en una comunidad pueden ocurrir por diferentes motivos, en función de dónde se localice el origen de la fuga:
- Las tuberías comunitarias o bajantes suelen ser las responsables de un gran número de estos siniestros, sobre todo en los inmuebles más antiguos. En este supuesto, la responsabilidad está bien definida: los gastos asociados al arreglo corresponden a la comunidad, bien a través del seguro o directamente del bolsillo de los vecinos. Dado que estos conductos son un elemento común, la propia comunidad debe responsabilizarse de su mantenimiento y de solventar los desperfectos que se originen.
- Este tipo de incidentes también puede tener el foco en una tubería privativa de un piso en concreto. En este supuesto, el propietario está obligado a reparar la fuga, así como a sufragar los daños que se hayan producido en otras viviendas contiguas o en las zonas comunes del edificio. Del mismo modo, si se cuenta con un seguro de hogar, gracias a la cobertura de daños por agua y de responsabilidad civil es posible devolver la normalidad al bloque rápidamente y sin ningún coste.
- Por otro lado, los daños por agua en una comunidad pueden tener su origen en los fenómenos atmosféricos, como lluvia, tormenta o granizo. En este caso, lo más importante es averiguar por dónde se está produciendo la filtración para solventar el problema. Por norma general, la comunidad de propietarios siempre se hace cargo de los gastos asociados a este incidente.
Cobertura de daños por agua
Como hemos comentado, es fundamental que el seguro de comunidades de propietarios incluya la cobertura de daños por agua. Esta garantía cubre la reparación o indemnización de los desperfectos que se produzcan en los bienes asegurados como consecuencia de un derrame accidental o una fuga procedente de instalaciones, filtraciones, grifos, llaves de paso, etc.
A la hora de contratar una póliza para proteger un edificio de viviendas es muy importante tener en cuenta el capital asegurado. Si se produce un siniestro cuya reparación se estime en un gasto superior, la propia comunidad de vecinos deberá asumir la diferencia.