Vivir con un animal doméstico tiene multitud de ventajas, pero no hay que perder de vista que también conlleva ciertas responsabilidades. Aunque nuestra mascota esté perfectamente adiestrada, nunca podemos asegurar por completo que no vaya a morder a algún desconocido, bien porque se sienta amenazada, tenga miedo o por cualquier otro motivo. En este sentido, hay que tener claro que el dueño del perro es quien debe asumir los gastos por los posibles daños que ocasione el animal, tanto a objetos como a personas.
Dado que los animales domésticos se convierten en un miembro más de la familia, muchos Seguros de Hogar contemplan entre sus coberturas ciertas situaciones en las que se puedan ver envueltos nuestros fieles amigos.
¿Qué cubre el seguro de hogar exactamente si mi perro muerde a alguien?
Por norma general, las pólizas de hogar que incluyen a las mascotas, protegen frente a la responsabilidad civil que contrae el propietario del animal por los daños que éste pueda causar a terceros. Por lo tanto, en estos casos, el seguro de hogar debe cubrir cuando se produce una mordedura por parte del perro hacia otra persona.
Además de esta protección, la aseguradora también indemnizaría por los daños accidentales que pueda sufrir el animal, así como los gastos veterinarios que se deriven del incidente.
No obstante, conviene comprobar las condiciones específicas de la póliza para saber si realmente estamos cubiertos en una situación así o si en su caso, es necesario contratar un seguro para animales de compañía, donde se incluye la responsabilidad civil como cobertura principal.
En el supuesto de que el seguro de hogar se responsabilice de la mordedura del perro, también es importante informarse del tipo de animal que queda cubierto, ya que es probable que los perros de razas peligrosas queden excluidos. Del mismo modo, la compañía aseguradora también establecerá ciertos requisitos de vacunación, seguridad e identificación del animal para que el dueño del perro pueda beneficiarse de la indemnización por responsabilidad civil.
Es de suma importancia revisar las exclusiones del contrato para averiguar en qué situaciones la aseguradora puede no responsabilizarse del incidente, como por ejemplo, si la mordedura ocurre cuando el perro estuviera perdido o iba sin correa.
¿Cómo estar protegido al máximo teniendo un perro?
Además de la protección que nos ofrece un seguro de hogar frente a la responsabilidad civil a la que dé lugar nuestra mascota, como puede ser el caso de que nuestro perro ataque a alguien, si se diera la situación de que la póliza de nuestra vivienda no contemplara una cobertura de estas características, siempre es recomendable estar respaldado por un seguro para mascotas.
En determinadas regiones, como Madrid y País Vasco, quienes tengan un perro como mascota están obligados a suscribir un seguro de responsabilidad civil que cubra los daños materiales y personales que el animal pueda ocasionar a terceros.
Pero además de amparar la responsabilidad civil, este tipo de seguros también ofrece otros muchos servicios que serán de gran utilidad para quienes convivan con un perro. Entre ellos, destacan la asistencia veterinaria en el caso de que el animal sufra un accidente o una enfermedad, la posibilidad de asegurar a aquellos animales con un alto valor o que sean necesarios para realizar ciertos trabajos, defensa jurídica u orientación veterinaria.