Según los datos recogidos en la Memoria Social de Unespa, Asociación Empresarial del Seguro, existe cierta relación entre el tamaño de una vivienda y su aseguramiento; es decir, cuanto más grande sea una vivienda más probabilidad hay de que se encuentre asegurada. De esta manera, si la superficie de un inmueble es de entre 61 y 90 metros cuadrados, la probabilidad de que esté asegurado llega al 77%, mientras que en los apartamentos de 35 metros cuadrados o menos esta desciende al 31%. Si la superficie de una vivienda supera los 250 metros cuadrados, la tasa de aseguramiento llega a alcanzar el 83%.
Si se toma de referencia el número de habitaciones, un 44% de las viviendas con una única estancia está cubierto por una póliza de multirriesgos; este porcentaje asciende al 76% en las casas con cuatro habitaciones y alcanza el 87% para aquellos inmuebles que tienen siete o más cuartos.
El tipo de vivienda también es un factor que induce a los propietarios a contratar o no un seguro del hogar. De este modo, las personas que tienen un piso son más propensas a suscribir una póliza que quienes tienen una casa unifamiliar. Así, un 82% de los residentes en bloques con más de 10 vecinos cuentan con seguro del hogar. Este porcentaje es del 69% entre quienes viven en un adosado.
Según los datos de Unespa, la finalidad de la vivienda y la existencia o no de cargas sobre la misma también induce a contratar un seguro. De hecho, el 92% de las casas hipotecadas están protegidas por un seguro. Entre tanto, la cobertura es más elevada si el piso es de plena propiedad de su titular y se emplea para uso propio (80%) que si se destina para alquilar (70%). Finalmente, las casas de renta antigua son las menos propensas a encontrarse aseguradas.
Los últimos datos de Unespa reflejan también que el seguro del hogar pagó más de 2.000 millones de euros al año para resolver 5,9 millones de siniestros. Estos percances llevaron a las aseguradoras a efectuar pagos por 2.024 millones de euros, ya fuera para atender las reparaciones o como compensación dineraria al asegurado.
Madrid, Andalucía, Cataluña y Comunidad Valenciana registraron la mayor parte de los siniestros y cuantías indemnizatorias -son las regiones más pobladas y urbanizadas-. Estas cuatro comunidades juntas reúnen algo más del 60% de los incidentes sufridos en viviendas en toda España y generan una porción similar de los desembolsos que efectúa el seguro a causa de los siniestros.