Cuando se solicita un préstamo, ya sea personal o hipotecario, o se contrae algún tipo de deuda, es recomendable conocer el significado de los términos asociados. Uno de los más relevantes es el saldo vivo que, en una primera aproximación, se puede definir como la parte de una cantidad de dinero que está pendiente de pagar. En las operaciones de financiación, este concepto también recibe el nombre de capital vivo y se puede calcular en cualquier momento de la vigencia del crédito.
Hay que tener en cuenta que hasta que no se procede a saldar la totalidad de un préstamo, sigue existiendo la obligación del deudor respecto a la cuantía que reste.
¿Para qué se utiliza el saldo vivo?
Para obtener el saldo vivo hay que tomar la cantidad total del préstamo menos el importe que se haya abonado. Sin embargo, en este cálculo se deben considerar también los intereses, que por norma general se calculan únicamente sobre la cuantía pendiente de pago y que forman parte asimismo del saldo vivo.
Por otro lado, este concepto se utiliza de igual modo a la hora de calcular la rentabilidad que se debe abonar a los ahorradores en base a la cantidad de dinero que hayan invertido durante un periodo concreto. Junto a ello, el capital vivo tiene una relevancia especial en el sector gubernamental, fundamentalmente cuando se contrae deuda pública o externa.
En ambos casos, los intereses se obtienen de la misma manera, es decir, sobre el saldo vivo existente en un momento dado.
No obstante, la principal aplicación de este concepto está relacionada con el cálculo de las amortizaciones de una hipoteca. En base al mismo se obtiene el capital que aún no ha sido pagado cuando se solicita dicha información. De hecho, cualquier persona que tenga una deuda con un banco u otra entidad financiera, tiene el derecho de obtener información sobre la parte del préstamo que está pendiente de pagar.
En la actualidad, gracias a la introducción de las nuevas tecnologías en la vida diaria, es posible consultar este dato directamente a través de la aplicación o la página web del proveedor, accediendo al área privada.
¿Qué sucede con el saldo vivo en caso de impago?
Hoy en día, el mayor porcentaje del saldo vivo en España se debe a las entidades bancarias, seguido de las cooperativas de crédito y otras empresas financieras. Aunque lo más normal es que los usuarios salden sus deudas, es importante saber que los impagos de un préstamo, un crédito o una hipoteca tienen efectos sobre el saldo vivo.
En esta situación, cada entidad actúa según la política que tenga marcada. Sin embargo, lo más común es que se aplique un suplemento en concepto de provisión sobre el capital que está pendiente de pago. Esta comisión suele ir aumentando a medida que se van sumando días de retraso sin que se realice el abono.
Para evitar contratiempos en este sentido, lo más aconsejable es contar con un seguro de amortización de hipotecas, gracias al cual es posible asegurar el importe que esté pendiente de amortizar de la hipoteca sin comprometer el patrimonio personal.
Entre las principales garantías de esta póliza se encuentra la cobertura por fallecimiento del asegurado independientemente de la causa, así como por invalidez absoluta o permanente.