Uno de los principales motivos por los que es muy complicado contratar una hipoteca siendo autónomo es la dificultad para demostrar que se tiene solvencia suficiente a pesar de no contar con una nómina fija. Las entidades financieras suelen mostrarse bastante reticentes ante este aspecto y llegar a convencerlas de que no existirá ningún problema en el pago de las cuotas se presenta como una misión casi imposible.
Además de ello, otra traba en las hipotecas para autónomos se encuentra en su declaración de la renta. Con el objetivo de compensar los gastos, muchos de estos trabajadores reflejan un nivel de ingresos inferior al que perciben realmente. Aunque a través de los movimientos bancarios se puede comprobar cuáles son los verdaderos beneficios, es fundamental que en el IRPF se reflejen unos datos lo más próximos posible a la realidad.
Ayuda para conseguir una hipoteca para un autónomo
El principal objetivo de un autónomo que pretende conseguir un préstamo hipotecario es ganarse la confianza del banco. Esto pasa por presentar una mayor cantidad de documentos que minimicen el riesgo de la inestabilidad económica que suele caracterizar la actividad de los trabajadores por cuenta propia.
Dado que este tipo de empleados no pueden acreditar unos ingresos regulares ni un contrato de trabajo indefinido, la solución consiste en mostrar las garantías y avales con los que se cuente.
- Señalar los bienes que se tengan en propiedad.
- Manifestar las personas que pueden actuar como avalistas
- Presentar la declaración de la renta y de IVA de los anteriores trimestres, los últimos recibos de la cuota de autónomos, así como los movimientos en la cuenta del banco de varios meses atrás.
Junto a ello, en función de la política del banco, es posible que también se pidan las escrituras del negocio, el balance de cuentas, los contratos con clientes, etc.
Dado que las entidades financieras realizan un análisis más exhaustivo de la capacidad de pago, para que un autónomo consiga una hipoteca con mayor facilidad es recomendable presentar también un dossier lo más completo posible con toda la información del negocio. Asimismo, suele ser necesario comunicar todos los préstamos que se encuentren activos, tanto personales como de empresa.
Hay que tener en cuenta que, dentro del grupo de los trabajadores por cuenta propia, los autónomos dependientes suelen ser vistos con mejores ojos por los bancos que el resto. Por lo tanto, es más sencillo conseguir una hipoteca siendo autónomo de este modo y negociar las condiciones de la hipoteca.
No solo es importante informarse previamente sobre todos los requisitos que pueda solicitar el banco para conceder la financiación, sino que es interesante saber que ciertas pólizas sirven de ayuda para conseguir una hipoteca siendo autónomo. Es el caso de los seguros de accidentes que permiten seguir pagando las mensualidades gracias al capital acumulado.
De esta forma, se garantiza la obligación con el banco en el supuesto de que el trabajador fallezca o sufra una invalidez como consecuencia de un accidente que le impida desarrollar su oficio de manera normal.