Pocas situaciones existen en la vida tan alucinantes como hacer alguno de los mejores safaris de África. Los parques nacionales y los diferentes países de este continente son capaces de mostrar la naturaleza en su estado más puro, algo que invita a sumergirse para contemplar a los grandes animales en su propio hábitat, mientras el paisaje regala imágenes difíciles de olvidar.
Lo más aconsejable es recorrer las grandes reservas naturales entre los meses de julio y septiembre, ya que coinciden con la estación seca de estos lugares y es cuando los animales se encuentran más activos. En los destinos que hemos recopilado es posible encontrarse con leones, búfalos, hipopótamos, jirafas, elefantes…, que están altamente protegidos para evitar su extinción.
La fauna más increíble en los 4 mejores safaris de África
- Masai Mara (Kenia). Uno de los parques naturales más conocidos es el Masai Mara que alberga a un gran número de animales, por lo que en el caso de realizar un safari existen altas probabilidades de divisar alguno de los más majestuosos. En verano es una de las zonas de África con más afluencia de turistas y no es para menos, ya que tiene lugar la gran migración a través de la gran extensión del Seregeti: uno de los espectáculos más increíbles de la vida salvaje protagonizado por el desplazamiento de casi 2 millones de animales. La reserva de Masai Mara se inauguró en el año 1961 y desde entonces ha sido el escenario de algunos de los títulos del cine más conocidos, como por ejemplo “Memorias de África”.
- Kruger (Sudáfrica). Aunque esta zona de África alberga multitud de parques naturales, el Kruger es el más antiguo, que se remonta al año 1898. A su popularidad se suma su intensidad, donde es posible ver en directo a los 5 grandes (búfalo, elefante, león, leopardo y rinoceronte). Para aprovechar al máximo la visita al considerado uno de los mejores safaris de África es recomendable reservar una estancia de varios días para tener la oportunidad de desplazarse a todas las zonas y a cualquier hora del día.
- Okavango (Botsuana). El delta del río Okavango es el escenario perfecto para hacer un safari menos común por el agua en lugar de por las grandes llanuras. De esta forma, no sólo es posible contemplar los animales que acuden a beber agua, sino que muy cerca se encuentran también hipopótamos y cocodrilos, así como aves exóticas. En esta zona se encuentra el Parque Nacional de Moremi, donde habitan un sinfín de especies. Lo más emocionante de este safari en África es subirse a bordo de una barca tradicional que solo está fabricada con un tronco de madera vacío, aunque también se puede realizar la ruta en avioneta.
- Ngorongoro (Tanzania). Al norte de Tanzania se ubica el cráter de Ngorongoro que en la lengua de los masáis significa “lugar frío”, debido a las bajas temperaturas que se registran por la noche en el borde. Es una de las reservas naturales más importantes de África que se encuentra protegida. El cráter tiene un diámetro de más de 20 kilómetros y una profundidad de 600 metros, que sirve para alojar a los considerados 5 grandes animales. En este lugar se puede contemplar el Rinoceronte Negro que es una de las especies más amenazadas del mundo, aunque también jirafas, cebras, ñus, avestruces o flamencos.