En los últimos años, estamos viendo cómo cada vez más ciclistas ocupan las calles de nuestras ciudades. Este medio de transporte ofrece multitud de ventajas, entre las que se encuentran la posibilidad de realizar ejercicio físico mientras te desplazas, su bajo coste tanto de adquisición como de mantenimiento o el fácil aparcamiento.
Pero para beneficiarse de todos estos aspectos, no basta con coger una bici y empezar a pedalear, sino que también existen unas normas de circulación para ciclistas que se deben seguir al pie de la letra para evitar posibles riesgos durante los trayectos por la vía pública:
- Las bicicletas, cuando circulan de noche, por pasos inferiores y túneles, deben llevar un sistema de alumbrado obligatorio que consiste en una luz de posición blanca en la parte delantera y otra de color rojo, así como un catadióptrico también rojo, en la parte trasera. Junto con el alumbrado, los ciclistas también tienen que llevar una prenda reflectante por vías interurbanas para que se les pueda distinguir a una distancia de 150 metros.
- El uso del casco es obligatorio para los ciclistas y sus ocupantes que circulen por vías interurbanas, excepto en cuestas prolongadas o si hace demasiado calor. En el caso de las vías urbanas, sólo los menores de 16 años deben utilizar este elemento de protección.
- Los usuarios de bicicletas no pueden conducir con cascos que estén conectados a receptores o reproductores de sonido. También está prohibido el uso del teléfono móvil durante los desplazamientos.
- A la hora de llevar un ocupante en la bicicleta, deberá hacerse en una silla adicional homologada y la edad del pasajero no puede superar los 7 años.
- La tasa máxima de alcohol también es otro punto que se recoge en la normativa de circulación de los ciclistas. Se aplican los mismos niveles que a los conductores en general: 0,5 g/l de alcohol en sangre o 0,25 mg/l en aire espirado.
- Los ciclistas deben señalizar todas sus maniobras con los brazos. Así, para girar a la derecha se extiende el brazo derecho en posición horizontal con la palma de la mano hacia abajo o bien con el brazo izquierdo doblado hacia arriba y con la palma extendida. Cuando el giro se quiere realizar a la izquierda, se realizarán los mismos movimientos que en el caso anterior pero cambiando los brazos. En el caso de que el ciclista tenga que parar o frenar de forma brusca, se debe indicar moviendo el brazo hacia arriba y abajo con movimientos cortos y rápidos.
- Para circular por ciudad con la máxima seguridad, hay que hacerlo lo más cercano posible a la derecha de la calzada. En el caso de que se vaya en grupo, está permitido desplazarse de dos en dos como máximo, aunque si la situación entraña algún peligro, es necesario moverse de uno en uno.
- Las bicicletas también deben ceder el paso en las zonas habilitadas para el tránsito de peatones.
- Hay que recordar que los ciclistas siempre tienen prioridad de paso respecto a los coches y motos en los carriles bici, los pasos para ciclistas y los arcenes señalizados.
- Para realizar adelantamientos, las bicicletas deben extremar las precauciones y comprobar que la acción se puede efectuar sin correr ningún riesgo. Además, deben mantener una distancia lateral con el vehículo adelantado de 1,50 metros como mínimo.
- Una norma de suma importancia para los ciclistas es la que prohíbe su circulación por autopistas y autovías.
Siguiendo las normas de circulación para ciclistas, si te decides a moverte a través de este medio de transporte, podrás incrementar tu seguridad en tus desplazamientos. Además, no olvides contar con un seguro para bicicletas que te protege en las situaciones de mayor vulnerabilidad.