Ya han pasado treinta años desde que, el 13 de julio de 1987, España enviara a sus primeros 95 estudiantes del programa Erasmus a completar sus estudios en el extranjero. Desde entonces, un total de 952.100 españoles se ha sumado a esta iniciativa internacional que promueve la interculturalidad en el ámbito universitario.
Para participar de este programa, el beneficiario debe estar cursando una carrera de grado medio o superior y haber completado su primer año de formación. Una vez seleccionado, podrá continuar sus estudios por un periodo de tres a doce meses en otra universidad de un país europeo. Además de las becas que pueden solicitar, los estudiantes cuentan con otro tipo de ayudas específicas para ellos. Las aseguradoras no han querido estar ajenas a esta realidad y ya incluyen entre sus productos pólizas dirigidas particularmente a los jóvenes que se acogen al programa Erasmus.
Los erasmus europeos eligen España
Con el programa Erasmus+ (llamado así desde 2014), nueve millones de europeos han vivido una experiencia enriquecedora ampliando sus fronteras culturales a la vez que se preparaban mejor para un mundo laboral cada vez más globalizado.
De ellos, 42.537 ha elegido como destino España, lo que lo convierte en el país que más estudiantes ha recibido. Le siguen Alemania (con 32.871) y Reino Unido (con 30.183). En cuanto a salidas, somos los terceros en la lista (36.842), precedidos por Francia (39.985) y Alemania (39.719) también.
Programa Erasmus: Incremento de las becas
Una de las principales aportaciones de cara al futuro de este programa radica en su partida presupuestaria. Según los últimos datos de la Unión Europea, en 2015 participaron 678.000 jóvenes y recibieron una ayuda media de 281 euros al mes.
De los estudiantes beneficiarios, tan sólo el 46 por ciento procedía de familias sin tradición universitaria. Además, según revela un estudio de impacto realizado por la Comunidad Europea, uno de cada tres jóvenes pertenecía a un entorno socioeconómico desfavorecido.
Por este motivo, y con el objetivo de ampliar el programa y hacerlo más accesible a un mayor número de personas, en 2014 se aprobó un presupuesto de casi 15.000 millones de euros que estará en vigor hasta 2020. Una ayuda que beneficiará a un total de 520.000 participantes españoles.
Una Europa Unida
El éxito de este programa radica en el sentimiento de comunidad que se crea entre estudiantes de diferentes países. Es una experiencia en sí misma que fomenta, no sólo el aprendizaje, sino también la vida social. Tanto es así, que ha trascendido más allá del mundo académico para convertirse en un elemento importante de cohesión entre los jóvenes europeos.
De hecho, su nombre se inspiró en el filósofo, teólogo y humanista holandés Erasmo de Rotterdam, precursor del movimiento del Renacimiento y conocido por su convicción de una Europa unida más allá de las fronteras.
Erasmus es, junto al programa Eureka de innovación empresarial, el proyecto que mejor ha consolidado la idea de una Europa abierta y unida. Por este motivo, en 2004 obtuvo el Premio Príncipe de Asturias de Cooperación Internacional.