Los datos que maneja la Asociación Internacional de Líneas de Cruceros (CLIA) de cara al 2018 son muy favorables y no dejan lugar a dudas: se prevé que cerca de veintisiete millones de pasajeros zarpen en los próximos meses en uno de sus barcos asociados, entre los que se encuentran las principales operadoras del sector, lo que supone un aumento de pasajeros del veinte por ciento. Por ello, y para satisfacer la creciente demanda, se incrementará la flota de barcos para este año, con veintisiete nuevos buques marinos, fluviales y especializados.
Esta tendencia se aprecia, sobre todo, en el público más joven. Ahora son los millennials los que se suman al turismo de cruceros porque ofrecen una visión más cosmopolita de los viajes. Según la CLIA, de entre los tipos de cruceros, los jóvenes eligen mayoritariamente los fluviales y de corto recorrido, ya que dan mayor importancia al lugar de destino antes que al trayecto en barco, que se usa como un mero medio de transporte capaz de reducir la distancia entre varias ciudades. Otro de los sectores que demanda estos servicios son las familias que integran varias generaciones y que representan gran parte de los clientes de esta industria.
Viajar con crucero fluvial
Los cruceros fluviales que navegan en calma por los ríos más populares del planeta son los más demandados, ya que permiten al turista adentrarse hasta el mismo corazón de las ciudades, lo que reduce el tiempo de traslado desde el puerto hasta el centro de la ciudad, como ocurre en los cruceros marítimos. Pero además, cuenta con otras ventajas:
- Los itinerarios de estos cruceros suelen ser breves, ya que las ciudades que forman parte del mismo suelen estar bastante cerca. Esto hace que se aproveche más el tiempo en tierra y se reduzca considerablemente el de navegación. Todo esto se traduce en que las visitas son más relajadas.
- Este tipo de barcos ofrecen más exclusividad. Por las características del medio que recorren son más pequeños que los marítimos y, por ende, el número de pasajeros es más reducido (cerca de trescientos viajeros). El trato entre el personal y los clientes es más cercano, las actividades programadas son más accesibles y se aligera el momento de embarque y desembarque.
- En este tipo de trayectos, la inmersión en la cultura y costumbres de la ciudad visitada es más completa. Y no solo en tierra, en el barco, por ejemplo, la gastronomía se ajusta a los platos típicos del lugar por el que se esté pasando.
Los cruceros más demandados
Los cruceros fluviales por Europa son los más populares y representan el ochenta y siete por ciento de los trayectos, aunque cada vez son más los que se suman a otras experiencias en Asía y África.
Por su parte, los destinos de bajas temperaturas son los más buscados, tales como Canadá, Alaska, Países Bálticos o la Antártida, donde además se pueden realizar excursiones únicas que van desde pescar en el hielo hasta observar pingüinos.
Además, el sector de la salud y el bienestar también tiene sus seguidores. Los cruceros que ofrecen un aliciente extra como la promesa de liberar tensiones y estrés y abogan por cuidar la salud ganan cada vez más adeptos, como los cruceros cuyo objetivo principal es controlar el peso y que incluyen menús dietéticos a bordo. Todo sea por mantener un estilo de vida saludable, aunque solo sea por unos días. Una experiencia que conviene completar con un seguro de viajes que ofrezca la mejor protección frente a percances relacionados con su salud, accidentes personales, equipaje, demoras o cancelación, entre otros.