Lo más habitual es que en cada ciudad o municipio con un número de habitantes mínimo exista un centro de estas características. En definitiva se trata de un lugar de encuentro y ocio recreativo al que pueden asistir las personas de edad avanzada para disfrutar de un envejecimiento activo y relacionarse con otras de la misma localidad que se encuentren en una situación similar.
Alta y baja en el hogar del jubilado
En el caso contrario, las bajas de los socios se pueden producir por diversos motivos, como por ejemplo la renuncia expresa del interesado, haber incumplido algún punto del reglamento disciplinario o por fallecimiento. Además, si alguna persona no renueva su carnet de participante, lo más normal es que se entienda como una renuncia, excepto cuando haya tenido lugar alguna circunstancia excepcional que haya impedido la tramitación.
¿Por qué inscribirse en un hogar del jubilado?
En estos centros es posible encontrar espacios de lo más variados, desde un bar hasta un gimnasio, pasando por una biblioteca, sala de rehabilitación, zona de usos múltiples, etc. Además, con bastante frecuencia se suelen organizar talleres y actividades para todos los gustos: gimnasia de mantenimiento, informática, escritura, pintura, viajes culturales, petanca, mus, excursiones, celebraciones por las festividades, etc.
Los beneficios para los mayores son múltiples, fundamentalmente para favorecer su interacción y evitar el aislamiento, asimilar nuevos conocimientos y experiencias, potenciar la movilidad del cuerpo, incrementar la autonomía y mejorar el bienestar psicológico. Aunque emprender las actividades que más motiven por cuenta propia es una buena decisión, hacerlo en grupo y de forma guiada aumenta aún más la vitalidad y la repercusión en uno mismo.
Al pensar en el momento de la jubilación no solo basta con imaginar todas las actividades que se podrán llevar a cabo, sino que planificar el ámbito económico se presenta como una necesidad. Así, conviene suscribir un plan de pensiones cuanto antes para contar con un buen complemento a la pensión pública que permita llevar a cabo todo lo que se había ideado.