Cuando llega el momento de celebrar ciertos acontecimientos, como por ejemplo los días de Navidad, se suele recurrir a los petardos y los cohetes para expresar la alegría y el entusiasmo que se siente en esos momentos. Sin embargo, al igual que a muchos humanos no les hacen demasiada gracia este tipo de sonidos, a los perros les puede ocurrir lo mismo.
Las principales causas que hacen que un perro se asuste de los petardos y otros ruidos son sobre todo la falta de costumbre del animal a exponerse a este tipo de sonidos, el hecho de haber vivido alguna experiencia traumática en el pasado o una protección desmesurada por parte de los dueños.
En el caso de que no se trate de una fobia, podemos aplicar una serie de recomendaciones para hacer que el perro no se sobresalte con los ruidos fuertes. Sin embargo, si este miedo no se puede tratar, el animal puede llegar a sufrir ansiedad, taquicardias e incluso un paro cardiaco si la situación es muy grave.
¿Cómo hacer para que mi perro no se asuste de los petardos?
- Cuando el animal se sobresalte por el sonido de unas tracas o cohetes, debemos procurar controlar nuestro comportamiento, ya que si le damos más importancia de la que realmente tiene a esta situación, conseguiremos que nuestro perro se asuste aún más. Lo más recomendable es mantener una actitud relajada y normal, olvidándonos de salir corriendo del lugar donde estemos o abrazarle fuerte.
- Si el can tiene miedo ante cualquier tipo de ruido fuerte, para tranquilizarlo podemos acariciarlo y alejarlo en cierta medida del sonido. En el caso de que esta situación suceda en la calle, es posible colocarnos en una zona más resguardada o si el miedo aparece en casa, una solución consiste en cerrar las ventanas y poner algo de música relajante.
- Es muy importante no dejar solo al animal en casa si tenemos constancia de que en la calle se producirá este tipo de estruendos. Además de ponerse nervioso, es probable que comience a morder todo lo que encuentre a su paso.
- Distraer al perro mientras se suceden los ruidos fuertes es una solución sumamente práctica. Puedes intentar jugar con él o darle algo de comer o beber.
- Aunque una de las soluciones que pueden resultar más eficaces para que el animal no se asuste de los petardos sea la medicación, conviene consultarlo con el veterinario. No obstante, si la respuesta que tiene el animal frente al estrépito no es demasiado grave, es preferible no recurrir a los ansiolíticos u otras medicinas.
- Hay que tener en cuenta que en estos casos lo que conocemos como terapia de choque no funciona. Es decir, si el perro siente miedo ante los ruidos fuertes, no podemos forzarle a que se acerque a lo que le está asustando.
- En la actualidad existen unas prendas calmantes que consiguen relajar al animal a través de la presión que ejercen en su cuerpo. Si el perro ya está acostumbrado a utilizarlas, es una buena opción ponérselas cuando se asuste por los fuertes sonidos.
Además de poner en práctica estos consejos, también es fundamental armarse de paciencia y ser comprensivo con nuestro perro. No podemos olvidar también contar con un seguro para mascotas que incluya una cobertura de responsabilidad civil para poder hacer frente a los posibles daños que cause el animal en caso de escaparse cuando se sobresalte.