Es sorprendente el número de mascotas que hay en España, que se sitúa en torno a los 20 millones. De todas ellas, la mayoría son perros y gatos, y por detrás se encuentran otros tipos como por ejemplo pájaros, peces o tortugas. A pesar de que en la mayoría de los hogares es bastante habitual encontrar una mascota, no lo es tanto el hecho de contar con algún tipo de seguro específico para ella.
El reducido porcentaje de personas que deciden contratar un seguro de mascotas lo hace fundamentalmente eligiendo la cobertura de responsabilidad civil para cubrir los daños que el animal pueda causar a terceras personas. Sin embargo, aquellos que ofrecen asistencia veterinaria no son los más extendidos.
Seguro de mascotas y vacunas
Cuando un animal llega a un hogar es preciso que un veterinario realice un chequeo general para comprobar que se encuentra en perfecto estado. Además, sobre todo en el caso de los perros y gatos, dado que son las mascotas más comunes, también es obligatorio cumplir con un calendario de vacunación para garantizar su bienestar y evitar que presente ciertas enfermedades.
Por norma general, este tipo de tratamientos son responsabilidad del dueño del animal, ya que en la mayoría de los casos, los seguros de mascotas no incluyen las vacunas porque se considera una atención que no requiere tratamiento ni ha sido como consecuencia de un diagnóstico. En cualquier caso, es necesario revisar las condiciones de la póliza para comprobar los servicios que están incluidos o no dentro de la cobertura de asistencia veterinaria.
No obstante, la asistencia en un seguro para mascotas está garantizada en los casos de enfermedad o accidente. En estos casos quedan cubiertos los gastos de la consulta, las pruebas de diagnóstico, los análisis de laboratorio, la medicación, las intervenciones quirúrgicas, la hospitalización o la asistencia en el domicilio si fuera necesario.
Además, este tipo de pólizas también suelen ofrecer un consultorio telefónico para que los dueños puedan resolver cualquier duda que tengan respecto a la vacunación, aunque también sobre alimentación, educación e incluso planes de ocio que se pueden realizar con la mascota.
Dado que poner las correspondientes vacunas en las diferentes etapas de la mascota es de vital importancia, generalmente las compañías aseguradoras establecen como norma a la hora de contratar un seguro que éstas cumplan con el calendario de vacunaciones oficialmente establecidas. Además, para beneficiarse de la cobertura de asistencia veterinaria también suele ser obligatorio presentar una declaración del estado de salud del animal.
¿Por qué son necesarios los seguros para mascotas?
Aunque el seguro de mascotas no cubra las vacunas, contratar uno tiene múltiples ventajas, no sólo para la protección del animal sino para asegurar la tranquilidad del dueño. Así, este tipo de pólizas suelen cubrir los gastos por sacrificio y enterramiento o cremación del cadáver del animal en los casos de accidente, vejez o enfermedad.
Además, las personas que convivan solas con su mascota también pueden tener asegurada la estancia del animal en una residencia cuando el dueño tenga que ser hospitalizado. Asimismo, en la mayoría de los casos se contempla una cobertura para garantizar una indemnización por el valor del animal en caso de muerte o robo, junto con la colaboración para encontrar al animal en este último caso.