Cada vez más es más habitual encontrar en las ciudades europeas normativas que abogan por el uso de la bicicleta. De forma paralela, también se incrementa el número de viajeros que decide visitar un lugar por el que puedan moverse con este vehículo. Esta nueva corriente encaja a la perfección con otro modelo de turismo más sostenible y económico que va ganando adeptos por momentos.
Por ello, en este artículo hemos recopilado algunas de las mejores ciudades de Europa para ir en bici, donde se puede disfrutar del aire libre y se tienen en cuenta aspectos tan importantes como el planteamiento urbano o las infraestructuras para moverse con total seguridad.
- Berlín (Alemania)
La capital alemana es una de las principales impulsoras del uso de la bicicleta. Pasear en bici por la Puerta de Brandemburgo, la plaza de Alexanderplatz o el edificio del Reichstag es una de las mejores formas de descubrir los encantos de esta ciudad. Sin embargo, si el plan te parece perfecto, procura no elegir una fecha en la que el frío te impida mover los pies y las manos. - Copenhague (Dinamarca)
A pesar de ser la ciudad más poblada del país, en Copenhague hay sitio para quienes deciden desplazarse en un vehículo más sostenible. Tanto es así que el 62% de la población utiliza la bicicleta para moverse. Visitar esta urbe de esta forma es totalmente seguro, ya que cuenta con más de 300 kilómetros de carriles bici completamente separados de las vías por donde circulan otros vehículos a motor. - Ámsterdam (Holanda)
No hay duda de que Ámsterdam es una de las mejores ciudades de Europa para ir en bici. Aunque la longitud de sus carriles sea algo más reducida que en el caso anterior (15.000 kilómetros), alquilar una bici para recorrer sus canales, parques, edificios históricos y calles más singulares es una experiencia única. No obstante, antes de comenzar la ruta es importante familiarizarse con el entorno, ya que el elevado número de ciclistas con el que nos encontraremos puede suponer un cierto riesgo. - Sevilla (España
La capital hispalense fue una de las primeras urbes que decidió habilitar sus calles para el uso de la bicicleta. Sus carriles discurren a lo largo de 140 kilómetros, atravesando las zonas más turísticas, pero también donde se concentran los centros de negocios y universidades. Además, el servicio público de alquiler de bicis ha ayudado a que Sevilla sea uno de los mejores sitios europeos para ir en este vehículo. - Dublín (Irlanda)
Aunque ha sido una de las ciudades más rezagadas en cuanto a facilitar el uso de la bici, finalmente ha conseguido ocupar una buena posición. Debido al aumento de personas que utilizan el servicio de alquiler para moverse, se han reforzado las infraestructuras de forma notable. - Estrasburgo (Francia)
Estrasburgo no sólo es una de las ciudades con más encanto de Europa, sino también una de las más cómodas para desplazarse en bici. Gracias a su carril bici de aproximadamente 500 kilómetros es posible llegar hasta cualquier rincón, sobre todo a su centro histórico que fue declarado Patrimonio de la Humanidad.
A estas ciudades también hay que sumar otras, como por ejemplo Londres, París, Barcelona, Viena, Amberes o Burdeos, donde circular en bici es algo habitual y no una excepción. Si tú también quieres formar parte de esta corriente, no olvides hacerlo protegido con un seguro para bicicletas.