Si analizamos la evolución de fallecidos, heridos hospitalizados y heridos no hospitalizados de los últimos años, según las estadísticas de la Dirección General de Tráfico, se han registrado variaciones entre los años 1965 y 2015. Los datos son los siguientes:
– Año 1965: 5% de fallecidos, 26% de heridos hospitalizados y 68% de heridos no hospitalizados.
– Año 1998: 4% de fallecidos, 24% de heridos hospitalizados y 72% de heridos no hospitalizados.
– Año 2015: 1,2% de fallecidos, 7% de heridos hospitalizados, y 91,8% de heridos no hospitalizados.
Dispositivos de seguridad y seguro de coche
Lo primero que hay que considerar es que todo lo que lleve tu coche, por tu seguridad y para que tus pólizas de seguro de coche sean efectivas, debe estar homologado. Las marcas que se dedican a la fabricación de vehículos elaboran coches cada vez más seguros y con tecnologías más avanzadas, pero para evitar lesiones en accidentes es preciso aprender a utilizar los mencionados dispositivos de forma adecuada. En este sentido una de las precauciones más obvias es leer el manual del coche, que nos aportará toda la información necesaria para utilizar todos los dispositivos de seguridad adecuadamente.
Cualquier adaptación de asientos, mandos, cristales o sistemas de retención que no esté hecha por un experto y que no cumpla la normativa vigente, puede ponerte en riesgo ante la menor situación de peligro y puede dejar sin efecto la cobertura de daños sobre el vehículo originalmente proporcionada por tu compañía de seguros. Por ello, es fundamental que resistas la tentación de elegir accesorios baratos, tunear tu coche por ti mismo o hacer reparaciones temerarias.
Sistemas de seguridad del coche:
Sistemas de seguridad primaria o activa
Son los que tienen por objetivo evitar un accidente. Podemos destacar los siguientes:
– ABS: sistema antibloqueo de ruedas o frenos antibloqueo. Este sistema se utiliza en automóviles, aviones y algunas motocicletas, y su objetivo es evitar que los neumáticos pierdan adherencia en el suelo al frenar.
– ESP: control electrónico de estabilidad. Su función es que el coche mantenga la trayectoria que haya marcado el conductor con el volante.
– AEB: frenada de emergencia autónoma que permite al vehículo reducir la velocidad por sí solo si detecta un riesgo de colisión y sin necesidad de que intervenga el conductor.
– LDWS: sistema de aviso de cambio de carril de forma involuntaria. Detecta cuando nuestro vehículo cruza la línea que delimita dos carriles y nos avisa.
Sistemas de seguridad secundaria o pasiva
Son los que se utilizan para disminuir las consecuencias de los accidentes y evitar lesiones. Los más destacados son los descritos a continuación:
– Carrocería deformable. Uno de los elementos más importantes para proteger a los ocupantes de un vehículo es la carrocería. Sin embargo, se comprobó que la carrocería rígida no protege bien a los ocupantes, por lo que se desarrolló la carrocería deformable que adopta una forma determinada en caso de colisión para proteger a las personas.
– Cinturón de seguridad. Un cinturón de seguridad en un arnés diseñado para sujetar a un ocupante de un vehículo en caso de colisión. Se comenzaron a utilizar en aviones en los años 30 y posteriormente se utilizó en automóviles. En muchos países, como España, su uso es obligatorio.
– Protector cervical o reposacabezas. Este sistema de seguridad surgió en los años 50 y posteriormente se hizo obligatorio. Existen diversos tipos: los fijos o integrados y los ajustables o activos.
– Airbag. Este dispositivo se comenzó a instalar en los vehículos como complemento de los cinturones de seguridad. El airbag despliega, en caso de accidente, una estructura flexible que contiene gas comprimido, lo que reduce la gravedad de las lesiones que pueda sufrir un ocupante del coche por el contacto con el interior del vehículo.
– Isofix. Se trata de un sistema de sujeción para sillas de seguridad de niños que establece una serie de puntos de anclaje en los coches que permiten que las sillas de los niños se puedan montar de forma más rápida y segura.
Sistemas de seguridad terciaria
Son los que actúan tras los accidentes para minimizar las consecuencias y podemos destacar los siguientes:
– Dispositivos para evitar incendios. Existen una serie de depósitos de combustible que tienen el objetivo de evitar que el combustible se derrame tras un accidente o que cierran la inyección de combustible tras un golpe con el vehículo.
– Habitáculos seguros. En ocasiones el propio vehículo se convierte en una trampa para los ocupantes en caso de accidente, por ese motivo hay vehículos que permiten abrir las puertas sin dificultar o hebillas de los cinturones que favorecen una apertura sencilla.
– Llamada de emergencia. En algunos vehículos se instala un sistema que en caso de accidente llama a los servicios de emergencia informando sobre la gravedad y la localización. De esta forma se evitan esperas demasiado largas y se reducen los riesgos de empeorar las lesiones. En base a diversos estudios realizados se ha llegado a la conclusión de que en Europa se podrían salvar 2.500 vidas aproximadamente si los servicios de emergencia son avisados de forma rápida.
Precauciones básicas para evitar lesiones en accidentes
Además de tener en cuenta todos los dispositivos de seguridad del coche y controlar que funcionen correctamente, es preciso que tengamos una serie de precauciones básicas para evitar lesiones en caso de accidente. A continuación, detallamos algunas de esas precauciones:
– No dejar objetos sueltos dentro del coche. En ocasiones, por descuido, podemos dejar elementos sueltos dentro del coche como el teléfono móvil, latas de refrescos, cajas con enseres de diverso tipo. Es importante que utilicemos los huecos del coche que tengan tapa para guardar estos elementos y que aseguremos las cajas u otros objetos voluminosos con el cinturón de seguridad.
– Llevar siempre el cinturón de seguridad abrochado. El uso del cinturón de seguridad es obligatorio en España, sin embargo, hay ocasiones en las que si vamos a hacer trayectos cortos no nos lo ponemos y quedamos desprotegidos ante un posible accidente. Por ello es esencial abrocharse siempre el cinturón de seguridad, con independencia del trayecto que vayamos a realizar en coche.
– Evitar distracciones. Es muy importante, que si vas conduciendo, centres toda tu atención en la carretera, por lo que debes evitar el uso del teléfono móvil, del GPS, de la radio o cualquier otro dispositivo que te pueda distraer.
– Descansar y no consumir alcohol. El descanso es fundamental al volante, si sientes que tienes sueño es mejor parar y descansar un rato. Además, es importante que si vas a conducir debes evites el consumo de alcohol o de medicamentos que produzcan somnolencia.
Si has decidido comprarte un coche nuevo en 2017 y quieres apostar por la seguridad ten en cuenta los elementos de los que hemos hablado anteriormente para evitar lesiones y descubre, además, los Seguros de coche MAPFRE y sus diversas opciones para adaptarse justo a lo que más necesitas para tu coche.