Algunos daños en el vehículo se pueden sufragar sin demasiados problemas y sin que suponga realizar un gran desembolso. Sin embargo, otras averías tienen un coste mayor debido a las piezas que se necesitan cambiar o al tiempo de mano de obra. Cuando las reparaciones suponen un verdadero problema en el presupuesto mensual, entran en juego los créditos para reparar el coche. Aunque es preferible no tener que recurrir a un préstamo, lo idóneo es contar también con un seguro de coche que de mayor protección.
Por eso en MAPFRE, disponemos de forma opcional y según la póliza contratada, la cobertura de sustitución del vehículo por el cual se facilita al conductor un vehículo de alquiler equivalente al automóvil incluido en la póliza en caso de daños e incendio, robo, o por intereses y gastos del coste de la reparación del mismo.
Diferentes opciones para financiar la reparación del coche
De esta manera, se puede prevenir un gran porcentaje de averías que implican un importante desembolso económico. A pesar de ello, cuando se necesita un dinero extra para pagar la reparación es posible optar por alguna de las siguientes vías:
- Existen algunos talleres que financian las reparaciones para que sus clientes puedan pagar cómodamente las facturas. Esta alternativa es una de las más prácticas, aunque conviene informarse previamente sobre cuáles son las condiciones y los intereses que se aplican al precio total.
- En las diferentes entidades de crédito, e incluso en los bancos, también es posible pedir un préstamo para reparar el coche. A través de esta forma, es posible elegir el pago a plazos que mejor se ajuste a las necesidades personales y la capacidad económica en cada momento. Es recomendable leer detenidamente todas las condiciones antes de firmar, ya que los intereses que se aplican en estos casos suelen ser bastante altos.
- Los usuarios que dispongan de una tarjeta de crédito, pueden utilizarla a modo de préstamo para arreglar el coche según la cuantía que tengan autorizada y el coste de la reparación. Este tipo de producto financiero permite aplazar el pago de las compras que se realicen e incluso, según la entidad financiera, se puede elegir la forma de abono.
- Otra solución son los minicréditos para arreglar el coche que se engloban dentro de los préstamos personales y que también son conocidos como préstamos preconcedidos. Normalmente, los bancos ofrecen este tipo de ayuda a los clientes que cuentan con un buen historial financiero. Lo mejor de esta opción es que se suelen conceder con bastante rapidez, sin que sea necesario realizar un estudio de solvencia previo.