Alquilar una vivienda a alguien desconocido siempre es un motivo de cierta preocupación, ya que no podemos prever a ciencia cierta si el inquilino mantendrá la casa en buenas condiciones o si pagará cada mes el alquiler. Además, en los últimos años y debido a la incertidumbre del mercado laboral, los casos de impagos en las viviendas de alquiler se repiten con bastante frecuencia.
Así, si eres propietario de un piso que quieres poner en alquiler, posiblemente te estés preguntando si es preferible hacerlo de forma particular o alquilar con un profesional inmobiliario. Aunque la segunda opción conlleva un coste, en muchas ocasiones las ventajas que reporta al dueño son mayores que si él mismo se encarga de gestionar el arrendamiento sin ningún asesoramiento.
Beneficios de alquilar con agencia
- Orientación e información a la hora de elaborar y firmar el contrato de alquiler. A través de un profesional, el documento recogerá los aspectos que se consideran válidos desde el punto de vista legal, excluyendo ciertas cláusulas abusivas que en los últimos años están inundando los contratos con las que el arrendador se asegura no perder dinero.
- Al alquilar el piso con una agencia, ésta se encarga de seleccionar un perfil de inquilino que sea solvente y de fiar para minimizar al máximo posible problemas en el futuro.
- Las agencias transmiten una mayor profesionalidad y confianza en los inquilinos a la hora de solicitarles información ciertamente comprometida, como puede ser la nómina, la declaración de la renta o cualquier otro documento para analizar su capacidad de solvencia.
- Confiando en una agencia inmobiliaria para alquilar una vivienda, el propietario se desentiende de los cometidos del día a día, ya que es el profesional quien se encarga de gestionar todo lo necesario con el inquilino después de haber firmado el contrato de arrendamiento.
- Gracias a los servicios que ofrecen las agencias de alquiler, el dueño del inmueble consigue un ahorro de tiempo considerable, al delegar todas estas tareas en la inmobiliaria.
Desventajas de alquilar con un profesional
- Como hemos comentado antes, recurrir a un profesional para que gestione el alquiler de una vivienda conlleva ciertos costes que varían según la inmobiliaria. Es recomendable analizar la situación para valorar si compensa pagar dichos honorarios por todos los servicios de los que nos podemos beneficiar en este sentido.
- Cuando un inquilino alquila un piso a través de una inmobiliaria, por norma general debe hacer frente al pago de una o dos mensualidades más para costear los servicios de la misma. Esto es algo que en muchas ocasiones echa para atrás a los usuarios que buscan una vivienda para arrendar.
- Para evitar impagos, las agencias también suelen exigir requisitos más estrictos a los inquilinos, por lo que el proceso de alquiler se puede dilatar en el tiempo.
- A través de un profesional, la negociación del precio o de otras condiciones del alquiler es algo más complicada, ya que todas estas gestiones están establecidas previamente o se definen a través de la agencia.
Después de analizar las ventajas e inconvenientes de alquilar con una agencia, sólo hay que estudiar si compensa o no según las necesidades particulares y la experiencia previa en el caso de que hayamos alquilado con anterioridad. No obstante, siempre es importante contar con un seguro de hogar que se haga cargo de los posibles imperfectos que puedan aparecer en la vivienda para que el inquilino pueda disfrutar del espacio con plenas garantías.