En muchas ocasiones, el derroche de energía en una vivienda se produce sobre todo por una serie de malos hábitos que se pueden cambiar de un modo más sencillo de lo que cabría pensar. En otro nivel superior, en la actualidad los proyectos de arquitectura ecológica están cobrando cada vez más importancia, por lo que cuando llega el momento de reformar la casa, conviene contemplar sus criterios. Mejorar la eficiencia del hogar supone un desembolso, aunque a largo plazo se traduce en ahorro de energía y costes, sin olvidar la contribución a un consumo más respetuoso con el planeta y un mayor confort en la vivienda.
Ideas para conseguir una casa más sostenible
- Aislamiento. Unos buenos cierres de doble cristal en las ventanas, terrazas y balcones significan ahorro, ya que permiten mantener la temperatura en el interior de la vivienda sin que se produzca ningún escape. Además, también es interesante impermeabilizar las paredes con los materiales adecuados, como por ejemplo caucho o pladur, para conseguir un mejor aislamiento térmico. Del mismo modo, los materiales mejor indicados para el suelo son la tarima y el parqué.
- Nuevas tecnologías. El hogar conectado es una apuesta segura para mejorar la sostenibilidad en casa. A través de la conexión a Internet, los diferentes objetos cotidianos pueden cumplir su cometido de una forma mucho más eficiente. Uno de los efectos más inmediatos es la reducción del consumo de energía debido a que los recursos se utilizan de un modo inteligente.
- Luces de bajo consumo. Es uno de los consejos que se repiten hasta la saciedad, pero es que la realidad demuestra que cambiar las antiguas bombillas (https://www.mapfre.es/seguros/particulares/hogar/articulos/bombillas-wifi-ahorro-para-el-hogar.jsp) por modelos LED ayuda a minimizar la contaminación del entorno. Además, su consumo energético es inferior, por lo que también se nota en la factura de la luz.
- Reciclaje. Lo ideal sería reducir a cero la cantidad de residuos que se generan, aunque como es casi imposible, el reciclaje se presenta como el mejor aliado para poner nuestro granito de arena en el cuidado del medio ambiente. No obstante, siempre hay que intentar reducir la cantidad de basura y dar una segunda vida a los objetos que ya no se utilicen habitualmente.
- Energías renovables. El uso de energías alternativas más respetuosas con el entorno ya es una realidad en muchas zonas. En lugar de la electricidad, si se cuenta con los medios adecuados, la energía solar es una fuente viable para el uso doméstico.
- Ahorro de agua. Existen miles de recomendaciones para controlar el gasto de agua en casa, pero más allá de acortar el tiempo de las duchas o cerrar el grifo mientras nos lavamos los dientes, también se puede echar mano de algunas soluciones modernas, como por ejemplo colocar una cisterna de doble descarga para reducir el consumo de agua a la mitad cada vez que se utiliza, así como instalar atomizadores en los grifos que permiten que salga la misma presión con una menor cantidad.
- Temperatura adecuada. Para incrementar la sostenibilidad en casa no hay que olvidar que los grados de la calefacción o el aire acondicionado juegan un papel fundamental. Así, en invierno es recomendable que no supere los 20 grados y en verano, seleccionando 26 es suficiente.
- Materiales ecológicos. En las nuevas construcciones sostenibles, los materiales respetuosos con el entorno son los grandes protagonistas, como la piedra, la madera, etc. Además, a la hora de pintar la casa, también es aconsejable elegir pinturas lo más naturales posible que estén libres de tóxicos.