Agua, fuego, gas, cuchillos… las cocinas reúnen todas las características para ser uno de los espacios del hogar más proclives a accidentes. Los estudios sobre seguridad en el hogar confirman que la cocina es la estancia de una casa donde se producen más siniestros. Los principales accidentes que puedes sufrir en una cocina van desde los más leves cortes hasta peligrosas caídas o intoxicaciones por gas, por ejemplo.
Según la fuente de peligro y la consecuencia, los principales accidentes que puedes sufrir en una cocina son:
- Por problemas o incidencias en los suministros.
El gas, sobre todo, el butano es la energía más peligroso en una cocina… puede provocar al menor despiste o por una mala combustión graves explosiones, fuegos e intoxicaciones.
El agua, por su parte, aunque parece más inofensiva puede ocasionar graves pérdidas materiales y desperfectos en la cocina. Los electrodomésticos como la lavadora y el lavavajillas pueden ser fuente de inundaciones muy dañinas ocasionando daños tanto en el propio hogar como en el de los vecinos en caso de tratarse de una vivienda de pisos, ya que el agua suele empapar al desbordarse con relativa facilidad las viviendas colindantes.
La electricidad también es fuente de accidentes y en la cocina especialmente por su cercanía con focos de agua como el fregadero. Los enchufes situados sobre las encimeras deben utilizarse con precaución y siempre evitando salpicaduras accidentales que pueden provocar electrocuciones fortuitas y con graves consecuencias. - Golpes o caídas.
Las cocinas suelen estar completamente amuebladas: puertas superiores y inferiores. Son habituales los golpes en la cabeza con puertas abiertas de los armarios superiores que no están correctamente protegidas, las contusiones con las esquinas de las encimeras… entre los accidentes más comunes en una cocina y con consecuencias más graves están las caídas de escaleras en mal estado o taburetes que se utilizan de forma insegura e irresponsable en la cocina. - Productos tóxicos.
En la cocina suele haber una alta concentración de productos altamente tóxicos e inflamables, para evitar accidentes es indispensable que estos productos estén a buen recaudo y correctamente almacenados de acuerdo con los consejos del fabricante, a temperaturas y condiciones seguras. Evitando así, irritaciones, reacciones alérgicas y en los casos más alarmantes, intoxicaciones.
Las intoxicaciones por ingesta de productos de limpieza son relativamente frecuentes entre los más pequeños de la casa, por lo que es imprescindible mantener todos estos productos fuera de su alcance. - Heridas y cortes.
Las tareas más comunes en una cocina implican el uso de tijeras, cuchillos, peladores… en general, son herramientas que implican riesgos de corte, si no se utilizan con sumo cuidado y precaución. Los botes de cristal, botellas y latas también son fuente habitual de accidentes domésticos como heridas o cortes.
Aunque todos estos principales accidentes que puedes sufrir en una cocina, afectan y deben ser tenidos en consideración por todos los miembros de la familia, los expertos alertan que existen dos colectivos especialmente vulnerables: los niños, en concreto los menores de cinco años y las personas mayores de sesenta y cinco.
Para completar la seguridad tanto en la cocina, como en el hogar, de todos los miembros de la familia y dado que los accidentes ocurren a pesar de todo, es indispensable contar con la asistencia de un seguro de accidentes al que poder recurrir ante cualquier emergencia y que minimizará las consecuencias de cualquier siniestro aportando tranquilidad y rápidas soluciones a los accidentes más habituales.