- La solución idónea para evitar la ocupación ilegal en una vivienda que está vacía es alquilarla. De esta forma, se suprime el hecho de tener que hacer frente a numerosos gastos que origina un inmueble desocupado y al mismo tiempo, se está favoreciendo el acceso a la vivienda a otras personas.
- En el caso de que el alquiler no sea viable, es recomendable visitar de forma regular la casa para limpiar la suciedad que se vaya acumulando, vaciar el buzón o regar las plantas que se hayan colocado de manera estratégica en el balcón o terraza. Del mismo modo, es aconsejable dejar las persianas ligeramente levantadas para dar la sensación de que hay gente en el interior.
- Si no se puede acudir frecuentemente a la vivienda, se puede avisar a los vecinos para que hagan el favor de estar pendientes de algún movimiento extraño o ruidos en la misma. Por norma general, los pisos más susceptibles de ser ocupados son aquellos que están en bloques donde apenas vive nadie.
- Instalar una puerta especial de alta resistencia para evitar que entren personas ajenas a la propiedad. Este tipo de puertas están fabricadas con materiales metálicos y cuentan con diferentes sistemas que hacen casi imposible su apertura sin llave.
- Los sistemas de alarma también son una solución para evitar okupas. Se puede optar por instalar un mecanismo de videovigilancia para controlar en todo momento los movimientos que se realicen tanto en la entrada de la casa como en su interior, así como colocar un sistema de alarma que comience a sonar cuando detecte el acceso de algún intruso y avise a la policía.
- Si el piso que se quiere prevenir de la ocupación ilegal se encuentra en una comunidad de vecinos, es recomendable que la misma cuente con un portero o conserje. Esta figura puede impedir el paso de personas ajenas al edificio y evitar así la ocupación de los pisos que estén vacíos.
- Es aconsejable no publicar nunca todos nuestros movimientos en redes sociales. La información que se comparte en este tipo de plataformas puede ser sumamente valiosa para determinadas personas que buscan una vivienda que ocupar.
- Hay que evitar en la medida de lo posible colgar un cartel de “se vende” o “se alquila” en la vivienda, ya que ello puede ser un reclamo para los ocupas.
Si aun siguiendo estos consejos para evitar okupas, la casa es habitada por personas ajenas, el coste de desalojarlas es bastante alto (2.000 euros aproximadamente). Además de este gasto, también es necesario recurrir a la vía judicial y una vez recuperada la vivienda, será preciso reparar los desperfectos que se hayan originado. Aunque un seguro de hogar siempre supone un extra de tranquilidad, en estos casos aún más, sobre todo si incluye unas coberturas específicas para vigilancia y protección urgente, así como para realizar reparaciones y reformas.