El agua es una de las principales causas de los siniestros en las viviendas que más cuesta reparar. El origen puede ser una fuga, una válvula de un grifo mal ajustada, una tubería en mal estado… En este último caso, por norma general, las compañías aseguradoras no suelen encargarse de arreglar los desperfectos que presenten las cañerías.
Cuando se contrata una póliza para proteger una casa, hay que tener en cuenta que existen una serie de límites y exclusiones que deben estar reflejados en las condiciones. De este modo, es posible que la aseguradora se niegue a cubrir determinados siniestros que han ocurrido bajo determinadas circunstancias. Por lo tanto, es fundamental revisar el contrato y suscribir un seguro que ofrezca las soluciones más completas para mantener el hogar siempre a punto.
Coberturas del seguro para las tuberías MAPFRE
En el seguro de hogar MAPFRE, con la nueva cobertura de atascos quedan cubiertos los gastos para desatascar, limpiar, reparar o sustituir conducciones o canalizaciones de desagüe.
Para ello, es necesario que la póliza contemple la garantía de daños por agua, así como que las conducciones estén fijas y situadas dentro de los límites privativos de la vivienda, de tal forma que sirvan exclusivamente al inmueble asegurado.
Dado que los siniestros causados por agua, suelen tener su origen en las tuberías, es preferible anticiparse a los siniestros y procurar que las tuberías se encuentren siempre en perfecto estado. En caso de producirse un siniestro posterior por no haber efectuado las reparaciones necesarias en las cañerías, la compañía puede considerar que el siniestro se ha producido por culpa grave del asegurado. En este supuesto, se excluye la obligación de ofrecer la garantía de daños por agua, ya que se valora como una agravación del riesgo.
Por otro lado, la cobertura de atascos en el seguro de hogar también cubre los gastos que sean necesarios para desatascar, limpiar, reparar o sustituir conducciones o canalizaciones de desagüe, incluso cuando no se produzcan daños. En este supuesto, la obligación de la compañía suele limitarse a una intervención al año, estableciéndose un límite en la cuantía de los costes.
Además de contar con un seguro de tuberías, conviene no pasar por alto la prevención de las instalaciones de una casa. De este modo, es posible estar protegido en el hogar frente a los daños por agua que pueden causar importantes destrozos.